Residencia territorial combinó artes visuales y geografía en Casa Poli

  • Durante dos semanas estuvieron Carola Aravena y Camilo Veas en Coliumo, con su proyecto «Transectos de Recolección».

Los soñados parajes donde se emplaza Casa Poli en Coliumo son un destino recurrente para residencias artísticas, académicas y territoriales, que administra la Dirección de Extensión de la Universidad del Bío-Bío. Desde fines de 2023 la casa de estudios tiene en comodato esta obra de la firma Pezo Von Ellrichshausen. La artista visual Carola Aravena y el geógrafo Camilo Veas se establecieron en el lugar entre el 22 de agosto y el 5 de septiembre, con su proyecto «Transectos de Colección», con el que fueron seleccionados por Extensión UBB para la temporada 2025.

«Hace rato estábamos interesados por generar instancias colaborativas transdisciplinarias, que involucraran las artes visuales y la geografía. Camilo trabaja mucho con comunidades rurales, y específicamente litorales. En mi caso, imparto varios talleres de dibujo para niños y niñas, es decir, la creación de instancias para poder dialogar en torno a distintas temáticas a través del dibujo», cuenta Carola.

Por su parte, Veas agrega que complementa su especialidad con la narrativa gráfica que desarrolla Carola. Su desarrollo profesional se ha vinculado con la geografía litoral en Valparaíso, que complementa con la academia, pues es docente de la Universidad Católica de Valparaíso y en la Universidad Alberto Hurtado en Santiago.

«Había un interés común por generar una aproximación al territorio o, en este caso, al maritorio, que es el espacio habitado en las zonas costeras. Y no sólo desde la observación y la descripción, sino también poder instalar espacios de vinculación territorial, con las comunidades costeras. Creemos que hoy, frente a la crisis que vivimos a nivel planetario, es urgente generar puentes de diálogo para conocer el entorno y fue el llamado que recibimos desde Extensión UBB: poner en valor el patrimonio natural y cultural», comenta el geógrafo.

Los protagonistas de esta residencia territorial tienen dilatadas trayectorias, respectivamente. Son pareja y comenzaron a trabajar juntos en un taller que hicieron en Santiago, denominado «Ola de calor». Lo encabezó el Centro Interdiciplinario de Estudios de Territorios Litorales y Rurales (CIETLR) -del que Veas es director- y solicitaron a la artista visual generar una narración gráfica como herramienta de difusión. Su convergencia en temas de interés propició que continuaran en proyectos interdiciplinarios, como su reciente labor en Casa Poli.

Interacción con vecinos

Desde la génesis del proyecto «Transectos de Recolección», ambos profesionales consideraron las mediaciones como su motor. Así se contactaron con el Sindicato de Mujeres Recolectoras de Orilla y la Escuela Caleta del Medio, ambos de Coliumo. Incluso interactuaron con los vecinos en los meses previos a la residencia, lo que sirvió para preparar sus temas a tratar de la mejor manera.

«Muchas personas de la localidad nos dijeron no conocer la casa por dentro, sino que la veían como una infraestructura que incluso parecía abandonada, entonces llevarlos hasta ahí también fortaleció la colaboración. El trabajo con actores locales siempre es muy motivante y un desafío también, porque son distintos grupos de personas, con caracteres diversos, que a veces son factores difíciles de controlar. Pero, en síntesis, lo pasamos súper bien y, específicamente en el trabajo con los niños, partimos con actividades en la playa y luego en la Casa Poli. Nos contaron sus experiencias y escucharlos fue súper enriquecedor», confiesa Camilo.

Del mismo modo, Carola valora enormemente lo que significó trabajar en terreno con una comunidad local específica. Comenta que le impresionó particularmente compartir con sendos grupos humanos.

«Esa agrupación de mujeres recolectoras refleja un poder muy valioso de saberes, que conmueve que esté en la región, porque moviliza el trabajo de mar en Chile. También me encantó el trabajo con niños y niñas, por su apertura a conectar con nuestro proyecto. Fue un gran aprendizaje para nosotros», relata.

Los objetivos de esta residencia territorial apuntaban a que los vecinos conocieran y se impregnaran del ambiente que rodea a Casa Poli, y que los anfitriones pusieran sobre el mapa sus conocimientos locales. Ahora bien, Carola y Camilo confiesan que el resultado de esta experiencia les abrió muchas preguntas, que les gustaría analizar y responder en una publicación en el mediano plazo.