«Felidae L.A.»: Arte como herramienta de conservación ambiental

Juan Ignacio Ferrada Zambrano

Mediador Galería FEDUH

Durante el mes de septiembre la Galería FEDUH de la Universidad del Bío-Bío recibe la más reciente colección de la destacada artista urbana chillaneja Gabriela Ferrada Acuña, Felidae L.A. Se trata de una colección taxonómica pictórica de felinos latinoamericanos desarrollada en dos dimensiones: cinco obras de gran formato y un inventario de 30 cuadros de 20×20 cm. Desde la majestuosa Madre Puma que habita en Chile de norte a sur (cordillera, zona altiplánica, bosques, estepas y matorrales) hasta especies felinas poco conocidas. Una muestra que pone en valor el patrimonio natural y cultural del territorio que habitamos. Pues los felinos no sólo cumplen un rol fundamental en la regulación de ecosistemas, sino que también forman parte del imaginario colectivo como símbolos de fuerza, misterio y ternura.

A través de la técnica del stencil CMYK, que exige una precisión milimétrica entre la distancia del aerosol con el lienzo, se logra el correcto mezclado de los colores cian, magenta, amarillo y negro. Este proceso permite construir retratos capa por capa, otorgando a las obras una tridimensionalidad palpable que transforma a cada felino representado en un símbolo de resistencia y conservación. No olvidemos que esta fauna se encuentra en constante amenaza: la caza ilegal, el avance del sector urbano, la deforestación y la pérdida de hábitat provocada por el cambio climático, mantienen a estas especies en un grave peligro de desaparición.

Para Gabriela Ferrada, las capas de color representan las dimensiones intrínsecas del animal, ya sea biológica, cultural y emocional, las cuales son trabajadas con un doble propósito: expresar el amor hacia esta especie y visibilizar el peligro en que se encuentran, bajo el eslogan conocer para proteger. La representación de los fenilos no sólo exige el dominio de técnicas pictóricas, sino que también busca sensibilizar a través de la belleza e invitarnos a cuestionar cuál es la relación que tenemos con la naturaleza. Todas las obras van acompañadas con un mapa de ubicación un código de color que señala el grado de amenaza de cada especie, siendo el rojo el que indica un mayor riesgo. Proteger a estos felinos nos recuerda que también somos parte del ecosistema que sostiene nuestra propia vida, garantizando la continuidad en este planeta.

Muchas veces los discursos de activistas ecológicos o científicos, a pesar de ser muy necesarios, no logran generar un movimiento y una sensibilidad con las personas, ya que pueden ser vistos detrás de intenciones político partidistas. Frente a esta limitación, la obra toma un posicionamiento claro, la belleza como provocación de admiración, cuidado y conocimiento. El Gato Colocolo, el Gato de la Pampa Uruguaya o el Puma de las Amazonas son un gesto de unión latinoamericana que nos invita a generar una conciencia colectiva respecto a la urgencia de abordar estos temas que comprometen de manera transversal a toda la sociedad.